El cantante y productor británico Phil Collins, líder de Genesis, pisó por última vez un escenario el pasado sábado tras anunciar su retiro de la música luego de sufrir en los últimos años de una enfermedad que lo ha alejado del piano y la batería. La agrupación presentó el último de una serie de tres conciertos en la Arena O2, de Londres.
La preocupación por su salud inquietó a los miles de asistentes, pues Collins saltó a escena ayudado por un bastón y permaneció sentado durante sus 23 canciones; algunos calificaron su aspecto como ‘débil’ o ‘cansado’. En la batería estuvo presente su hijo Nic, de 20 años, quien se unió a los músicos Mike Rutherford y Tony Banks.
Cómo fue el último show de Genesis?
“Esta es la última parada de nuestra gira, y es el último espectáculo de Génesis. Después de esta noche, todos tendremos que conseguir trabajos de verdad”, expresó Collins, quien desde 2007 ha estado lidiando con problemas en los nervios de sus manos tras una vértebra dislocada en el cuello, lo que le ha traído complicaciones en su espalda. “Es difícil para nosotros creer que igual vinieron a vernos”, agregó.
Los conciertos de Genesis, quienes se reunieron luego de 14 años, estaban programados para finales del año pasado, aunque finalmente tuvieron que posponerse debido al resultado positivo a COVID-19 de sus integrantes. Collins, de 71 años, ya había anunciado en 2011 su retiro del mundo del espectáculo argumentando tiempo para pasar junto a su familia.
En las primeras fechas de esa gira, Phil Collins había aparecido bastante frágil, casi sin poder percutir su batería y caminando hasta el escenario ayudado con un bastón, cuando no lo hacía directamente en una silla de ruedas.
“No hago nada en absoluto. No practico cantar en casa, en absoluto. Ensayar es la práctica”, le dijo en su momento a The Guardian.
“Por supuesto, mi salud cambia las cosas, hacer el programa sentado cambia las cosas”, agregó al tiempo que aclaró que tener que afrontar el espectáculo en esos términos no significaba que iba a “estropearlo”.
“Pero en realidad descubrí que en mis recientes giras solistas, no se interpuso, que la audiencia seguía escuchando y respondiendo. No es la forma en que lo habría escrito, pero es la forma en que es”, redondeó.
“Esta noche marca el final de una era. Atestiguar este último concierto es verdaderamente una memoria para la vida y un evento que mantendré por siempre en mi corazón. Ni siquiera mi infinita gratitud le hace justicia”, compartió Lilly Collins, hija del músico.